El reportaje de Comunión se asocia con frecuencia a una cita previa al gran día, pactada con suficiente antelación y que tiene lugar en exteriores. Pero también es habitual que las familias soliciten que les acompañemos durante unas horas el mismo día de la Comunión, que es el momento culmen.

Era el día más esperado de Inés y su familia. Estuvo precedido por semanas de intensos preparativos para que todo saliera bien y coleccionar bonitos recuerdos para el futuro. La mezcla de sensaciones tenía que ser capturada por nuestros objetivos.

Reportaje de Comunión en el gran día

En el estudio ofrecemos flexibilidad suficiente como para adaptarnos a las necesidades de cada familia.

Algunas consideran que es suficiente con una sesión de fotos aproximadamente un mes y medio antes de la Comunión. Otras suman un reportaje postevento y nos piden que les acompañemos durante el gran día en casa, en la iglesia o en los inicios de la celebración. Nos adaptamos.

Como se puede ver en las fotos de Inés, es un acierto contratar el reportaje de Comunión en el gran día e invitar a los fotógrafos al domicilio familiar. El hogar es el lugar donde más cómodos se sienten los miembros de la familia, especialmente los niños, así que el resultado serán posados muy naturales.

También es el sitio que concentra más elementos personales, desde sus juguetes favoritos a instrumentos musicales. Van mucho más allá de los accesorios de un estudio, pues se trata de objetos con mucha personalidad que resultan más representativos.

Buscando siempre lo natural

El reportaje de Comunión en el domicilio familiar involucra a toda la familia y recoge poses, sí, pero no seremos nosotros quienes reneguemos de ellas. En la fotografía moderna se busca lo natural, pero un posado no será malo si no resulta forzado.

Como decimos, el domicilio familiar ofrece la calidez suficiente como para romper el hielo. Inés se sintió cómoda en su salón o en su jardín, posando con objetos personales como su piano y con sus familiares. No tuvo que hacer nada diferente a lo que hace en su día a día, por lo que el resultado es muy natural.

Con todo, acordar unas horas para realizar el reportaje de Comunión durante el gran día es un acierto. Es el momento culmen, y las sensaciones serán diferentes a las de las sesiones pre y postevento. ¡No renuncies a tener el mejor recuerdo!

 

Espero que os guste!

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Mary Guillén

Reportaje de Comunión – Inés