Las fotos de comunión de Alejandro

Para un fotógrafo profesional, la fotografía de comunión es todo un reto, ya sea en exteriores o en interiores, sacarle todo el jugo al reportaje no es tarea fácil. La mayoría de los niños son, de por sí, muy fotogénicos, y a diferencia de los adultos, aceptan de buen grado todas las apreciaciones que le hacemos los profesionales.

Alejandro, un joven muy fotogénico

El reportaje de Alejandro, como podéis ver, es de esos trabajos con el que cualquier profesional de la fotografía se siente plenamente satisfecho. Su predisposición en todo momento durante la sesión fue absoluta y eso se percibe en las fotografías.

La fotografía de comunión es muy agradecida si, como ocurrió con Alejandro, todos los actores que participamos en el trabajo vamos a una. Es importante en cualquier caso crear un ambiente idóneo para que los niños, en este caso Alejandro, se sientan cómodos, sobre todo si se trata de fotografías en el estudio, que es un lugar que puede resultar desconocido para el niño y sólo por eso se va a mostrar más retraído.

Las fotos con los hermanos, todo un clásico

En la fotografía de comunión, uno de los elementos que más se repiten es que en el reportaje haya una o varias fotografías con familiares, principalmente hermanos o primos. En el caso de que quien haga la comunión sea el hermano mayor, la foto tiende a mostrar ese sentimiento de cuidados hacia el hermano menor.

En el caso de Alejandro, la situación es justo la contraria, es su hermano mayor el que le acompaña, reflejando de algún modo esa idea de madurez y ejemplo en el que se fija Alejandro.

La melena de Alejandro

Pero sin duda alguna, el elemento distintivo de este reportaje es la melena de Alejandro, en varias de las fotos con primer plano y plano medio vemos la frondosidad de su pelo, todo un lujo para cualquier profesional poder fotografiar una melena de estas características.

Mary Guillén

Fotografía de Comunión: Alejandro